¿Cómo Se Hace El Pan De Molde? [Proceso En Fábrica]
CÓMO Se FABRICA El Pan De MOLDE?
En el vídeo de hoy descubriremos cómo se hace el pan de molde en una fábrica, desde que llegan las materias primas hasta el empaquetado, ¡comencemos!.
DESARROLLO
1. Recepción y Almacenamiento de Materias Primas
Cuando las materias primas (harina y levadura) llegan a la planta de producción, se someten a un estricto control de calidad.
Se analiza la harina. La humedad en la harina es un factor crítico que afecta tanto a la calidad de la masa como al resultado final del pan. Una humedad excesiva o insuficiente puede alterar la textura del pan, su sabor y su capacidad de conservación.
La levadura es esencial para el proceso de fermentación que hace que el pan se eleve. Las pruebas de actividad aseguran que la levadura esté viva y sea capaz de realizar su función correctamente. Se evalúa la capacidad de fermentación de la levadura en condiciones controladas para confirmar que activará la masa de manera eficaz.
Una vez que las materias primas han pasado los controles de calidad, se procede a su almacenamiento.
La harina se almacena en un lugar seco y fresco para protegerla de la humedad y de cambios extremos de temperatura que puedan afectar sus propiedades.
Dado que la levadura es un organismo vivo, su viabilidad puede verse comprometida si se expone a temperaturas elevadas. Por lo tanto, se almacena en refrigeración, lo cual ralentiza su metabolismo y preserva su actividad fermentativa hasta que se utilice en la producción.
2. Mezclado
Antes de comenzar el proceso de mezclado, se preparan y miden todos los ingredientes necesarios.
Después, se mide la temperatura del agua utilizando un termómetro para asegurar que se encuentre dentro del rango óptimo de 35°C a 46°C. Esta temperatura es ideal para activar la levadura sin dañarla.
Se comienza añadiendo los ingredientes líquidos al recipiente de mezclado, lo que incluye el agua a la temperatura correcta. En esta etapa, también se puede incorporar la levadura, disolviéndola si es necesario, para asegurar su distribución uniforme.
Después de mezclar los ingredientes líquidos, se empieza a añadir gradualmente la harina y otros ingredientes secos. Esto se hace lentamente para evitar la formación de grumos y facilitar la hidratación uniforme de la harina.
A medida que se añade la harina, el gluten comienza a formarse. El gluten es esencial para la estructura del pan, ya que proporciona la elasticidad y firmeza necesarias para retener los gases producidos durante la fermentación.
Una vez que la masa está lista, se procede al siguiente paso del proceso, la fermentación, donde la masa tendrá la oportunidad de levar y desarrollar aún más su sabor y textura.
3. Primera Fermentación (Bulk Fermentation)
Durante esta etapa, la levadura activa trabaja sobre los azúcares presentes en la masa, produciendo dióxido de carbono y alcoholes, lo cual no solo contribuye al levado de la masa sino que también juega un papel importante en el desarrollo del sabor y la textura del pan.
Después del proceso de mezclado y amasado, la masa se coloca en un contenedor grande adecuado para permitir su expansión durante la fermentación. Este contenedor a menudo está ligeramente engrasado para evitar que la masa se pegue.
Se deja la masa en un lugar cálido, idealmente entre 75°F y 78°F (24°C a 26°C), para optimizar la actividad de la levadura. La temperatura ambiente puede afectar significativamente la velocidad de la fermentación; un ambiente más cálido acelera el proceso, mientras que un ambiente más frío lo ralentiza.
Durante este tiempo, la levadura consume los azúcares presentes en la masa, produciendo dióxido de carbono y alcoholes. El dióxido de carbono se queda atrapado dentro de la red de gluten, lo que hace que la masa aumente de volumen y cree la textura aireada característica del pan.
El tiempo necesario para esta fermentación generalmente oscila entre 1 y 2 horas.
En algunas recetas, se realiza un "doblez" a la masa durante la fermentación para fortalecer la red de gluten y distribuir uniformemente el gas y la temperatura dentro de la masa. Esto implica desinflar ligeramente la masa y doblarla sobre sí misma varias veces.
La masa está lista para el siguiente paso cuando ha duplicado aproximadamente su tamaño y muestra una textura esponjosa. Un método para probar si la masa ha fermentado lo suficiente es presionarla suavemente con el dedo; si la impresión r